En los primeros cinco meses de 2018 los envíos de productos sureños al exterior aumentaron casi un 23%. La recuperación se dio en mayor medida en la ciruela seca, el aceite de oliva y en las maquinarias y partes.
En los primeros cinco meses de 2018 repuntaron las exportaciones del Sur mendocino, luego de una fuerte caída el año anterior. Este giro lo atribuyen al nuevo tipo de cambio, que en pocos meses cambió el panorama e hizo más conveniente vender al mundo.
En 2016 en la Aduana local se registraron envíos al exterior por 89,6 millones de dólares y en 2017 un total de 69,4 millones, lo que representó una caída promedio del 23%.
En este período casi todos los rubros exportaron menos, pero donde más se sintió el impacto fue en el sector de las frutas secas (principalmente ciruelas desecadas) que representa más de la mitad del total enviado a los mercados externos. De 50,1 millones de dólares se pasó a 36,4 millones al año siguiente, un 27% menos.
Pero llegó el 2018 y la situación cambió. De enero a mayo la región sur de la provincia hizo envíos al exterior por 29,5 millones de dólares, un 22,8% más que los u$s24 millones exportados en el mismo período de 2017.
Esta recuperación, según los números de la Aduana, se dio en casi todos los productos, aunque los que más crecieron fueron frutas de carozo, aceite de oliva y la mayoría de las productos de origen industrial, como maquinaria para la preparación de alimentos y bebidas y sus partes, componentes de máquinas y aparatos para la industria del petróleo.
Incluso algunas manufacturas industriales volvieron a exportarse después de un año de no venderse al exterior.
“El aumento del dólar hace que las empresas visualicen una mayor rentabilidad para sus exportaciones”, explicó Virginia Donati, responsable local de la Fundación ProMendoza.
Basta recordar que en los primeros días de enero el dólar cotizaba a 18 pesos con monedas y actualmente fluctúa en los 28 pesos.
“Lo que notamos por las consultas que recibimos a diario –añadió la funcionaria a Canal 6- es que se está recuperando la economía en ese sentido. Las empresas exportadoras están aumentando sus volúmenes, y otras que habían perdido mercados o habían dejado de exportar, están tratando de iniciar acciones para recuperarlos”.
Brasil es el principal comprador
La ciruela seca continúa siendo el principal producto de exportación del Sur mendocino y la mayor parte se vende a Brasil, por lo que cada medida arancelaria, comercial o devaluación que tomen allí tiene un gran impacto en la economía local y mendocina.
La ciruela deshidratada sin carozo que se destina al consumo se suele vender en cajas de diez kilos.
En tanto que la ciruela desecada con carozo que se destina principalmente a industria se envía a granel en big bags (bolsones especiales) de 500 o 1000 kilos, o bolsas de 25 kilos.
En esta modalidad también se vende a Rusia y Estados Unidos, aunque los envíos al país del norte están decayendo porque últimamente demanda certificaciones orgánicas que la producción sureña carece, salvo en casos excepcionales.
Por esta exigencia también se dificulta las exportaciones a países de Europa, según indicaron desde ProMendoza.
Destacaron la aparición de Israel a partir de 2015 como mercado para los productos locales.
Fuente: Aduana San Rafael – Fundación ProMendoza